jueves, julio 09, 2009

Una entrada cualquiera

Yo confieso ante ustedes hermanos, un terrible cuerpo helado el día de las candelas (y no la Candelaria), que he pecado de pensamiento "Die Wand", palabra MAL escrita a cada rato, obra, tiempo, lugar y forma. Y, claro, por las omisiones de hace 15 años, por lo que no fue; pero no por faltar a la lealtad (con sus respectivas consecuencias)ni por elegir del banquete del mundo. Con todo ello no tengo culpas, no me arrepiento. Aún siento en este frío un par de manos tibias que sostienen las mías.

1 comentario:

  1. ninive era una bella ciudad...
    la lealtad puede hacer arderla por sus cuatro costados
    y qué me dices de la mujer de lot convertida en estátua de sal
    o los muros de la valiente jericó

    qué me dices del tiempo alterado
    o de los distantes silencios pasmantes?

    chalrie virus dixit

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