martes, marzo 17, 2009

Sin título

Tinta amarga, infinita
coágulo en la garganta
vuelto dolor, desesperanza.

No alcanzaste a percibir
el halo ultravioleta
de las mariposas.

No pudiste subir
una vez más al puente,
ya no mirabas nada.

Era de noche, era tu noche
precipitándote al abismo,
adelantándote al silencio.

Tu mundo interior
trastornado en miseria exterior
de un alma en crisis.

Me duele hoy tu paso viejo.
Me duele también tu cansancio
y más aún tu partida.

1 comentario:

  1. CUANDO LLEGÓ A LO ALTO
    SU SUEÑO PRECISO DE QUE NOSOTRO NO ESTUVIERAMOS PRESENTES

    AHORA COMIENZA
    SU NO TIEMPO
    DUELE
    PERO LO JUSTO ES RECORDARLO UN POCO MENOS
    HASTA QUE LO BUENO
    QUEDE FRENTE A LA CAÍDA

    NOS QUEDA SU FUERZA
    Y SU DISTANCIA
    NOS QUEDA SU BRILLO QUE NOS CAMBIÓ A TODOS
    QUIENES LO CONOCIMOS

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